Y no lo digo yo, sino el autor de un libro que me ha acompañado desde que soy una niña. Anoine de Saint-Exupèry sabía lo que decía, y es que no hay otra forma de volar sino soltándonos las cadenas y dejándonos llevar. No se llega lejos atándose a nada ni a nadie, se llega lejos agitando las alas fuerte, sin miedo y con ganas.
Dejo de creerme filósofa y os hablo de mi ajetreada semana, porque sigo sin tener una semana en la que diga "no me ha pasado nada demasiado interesante", no sé si es porque estoy en América, si la razón es que soy yo que lo veo desde otra perspectiva o que realmente la vida aquí es un no parar.
El lunes tuvimos la reunión del book club para decidir el nombre y lo que pondríamos en la camiseta. Después de votar al menos tres veces para cada cosa, ya tenemos nombre, motto y quote. Después del entrenamiento fuimos a casa y mi sorpresa fue encontrármela completamente adornada para Halloween! Calabazas, pósters en las paredes... Deb, mi host mom se había pasado el día trabajando para que quedase perfecta, y os aseguro que no se sabe lo que es halloween hasta que llegas a América.
El martes el día se me pasó rápido, tal vez porque esa tarde era la última Jam con el equipo de cross country. El día no era perfecto para correr, pues había llovido toda la noche y seguía lloviendo cuándo llegamos a Athenes. Y lo peor todavía estaba por llegar: el circuíto. Veintisiete colinas contadas, todo barro y casi ninguna señalización. Todos los tiempos fueron dos minutos (mínimo) más lentos, y la mayoría de las que estábamos ya lesionadas fuimos a peor, pues las colinas no ayudaron nada. Aún así, después de que acabar de correr nos dieron hot dogs y empezó la pelea de barro. Creo que las fotos se explicarán mejor
Dorsales con el lazo para ayudar a la investigación contra el cancer de mama. |
Después de la pelea de barro. |
Elisabet, yo, Gabby y Meri |
Quedamos segundas en el Big 8, nuestra conferencia, y Gabby quedó novena individualmente, así que nos fuimos a casa muy contentos, pero con un segundo puesto que nos sabía a poco.
El miércoles lo más destacable para contar a parte de mi dolor de piernas fue el momento en el que, en mitad del cambio de clase, mi profesor de matemáticas me mandó entrar en una de las aulas rapidísimo. He de decir que dos segundos antes de darme de cuenta de que sólo era un simulacro estaba literalmente aterrorizada. Después del simulacro, jugamos al scrabble pero de números, pues bastantes alumnos estaban haciendo un examen parecido a la selectividad en España, pero que pueden repetir tantas veces como quieran.
El jueves empezamos en Pre-AP English Macbeth, de Shakespeare. Tengo que decir que pinta mejor que Frankenstein, pues al ser una obra cortita, vamos a representarla, y adivinad a quien le tocó ser una de las brujas que aparecen en el primer acto. Bueno, para ser sinceros me presenté voluntaria pues creía que el papel no podía ir más conmigo. Y algo hice bien, no sé si caminar como si fuese coja o la risa de que-malvada-soy, pero la gente se rió, y ya sabéis lo que me gusta a mi hacer reír a la gente.
Las tres brujas de Macbeth. |
En Publications fui con una de las chicas de Adv-Pub a Downtown a vender el anuncio que había diseñado para una de las tiendas de vestidos, ¡y les gustó! No os podéis imaginar mi alegría, porque la verdad, periodismo sigue llevándome por el camino de la amargura, pero sé que irá a mejor.
En cross country, sabiendo que no debería pero teniendo mi cabezonería como guía decidí correr 10km. Tecnicamente corrí nueve largos, pues mi entrenador llegó con el coche y nos recogió a Meri y a mi. Sólo quiero añadir que podría haber sido peor.
A llegar a casa subí a la habitación a hacer los deberes y unas horas después, Olivia y Dave volvieron a casa y trajeron chocolate caliente, algo que no pudo sacarme una sonrisa más grande.
El viernes en el instituto no pasó nada demasiado interesante. Un examen, muchos deberes de precálculo, avanzar en el artículo de periodismo y entrenamiento. Después del instituto, Katie, Claire, Olivia y yo quedamos para tomar algo. Después decidimos ir al supermercado a comprar pintura y nuestras iniciales de madera y vinimos a casa a pintarlas. No sé en que momento se me ocurrió decirles que tenía un secreto, pero como no quise contárselo, me tiraron al suelo y empezaron a pintarme la cara hasta que se lo conté. Supongo que no puedo quejarme con las amigas que he hecho aquí.
Katie, Claire, yo y Olivia. |
Olivia y yo. |
Creo que es un buen momento para explicar que esa podía ser mi última carrera con el equipo, pues ya solo nos quedan los regionales y los estatales. La verdad es que no sé todavía si voy a correr en los regionales, todo depende de cómo se encuentre Lorren, otra chica que también está lesionada.
El sábado me desperté a las seis y cuarto porque teníamos que ir a ayudar a preparar las cosas de cross. Después de dos horas de bus, llegamos a Gobles, y una vez más el tiempo no nos ayudó: lluvia y mucho frío. Fue posiblemente mi última carrera con el equipo varsity, y pese a no conseguir batir mi récord personal, volví a correr en mi marca habitual, así que estoy muy contenta. Además, quedamos segundas por equipos y en JV corrieron el resto de las chicas consiguiendo quedar todas entre las 25 primeras.
Elisabet y yo. |
Las tres estudiantes de intercambio con el trofeo. |
Razones por las que corro 10km. |
Todo el equipo, tanto JV como varsity. |
Sin duda, la sorpresa del sábado fue cuándo vi el correo que la profesora de español de mi instituto me había mandado. En el me decía que tenía un "alma vieja" una expresión que usan aquí, que le había gustado el blog, tanto estas entradas informativas, ya que son otro punto de vista distinto de la vida americana, como los relatos. Y si eso no era suficiente motivo para hacer que me sintiese alagada, me preguntó si podría usar el blog para sus clases de español. Cómo ya os podéis imaginar, para mi fue todo un honor y una sorpresa, y ahora no tengo excusa para no seguir mejorando.
Al llegar a casa, como Olivia y yo estábamos muy cansadas, decidimos que no haríamos deberes, así que vimos una película en el salón. Me dejaron elegir, así que me fui a lo seguro: The Prestige. Era la segunda vez que la veía en inglés, y no deja de gustarme ni un poquito.
El domingo cogimos el coche (nuevo, ¡por cierto! Lo compraron el miércoles y el jueves ya lo teníamos en casa) y nos fuimos a East Lansing a ver Once, el musical. Es precioso, casi consigue arrancarme alguna lágrima, y los actores y actrices tienen un talento increíble. La música inmejorable, así que, sin duda, os recomiendo que lo busquéis en Youtube y que escuchéis alguna de las canciones. Dentro del teatro no dejaban sacar fotos, pero os dejo algunas que he encontrado en google.
Otoño en Míchigan. |
East Lansing. |
Campus de la Universidad de Míchigan. |
El teatro de la universidad. |
Yo al lado del cartel del musical. |
De verdad que os recomiendo que lo escuchéis, así que clicando aquí accedeis directamente a un mix de Youtube con las canciones del musical.
Después fuimos a comer a un restaurante en el que la especialidad es el pavo. Es un restaurante con historia y no la ocultan para nada, antiguo y con un toque rústico, y mi parte favorita ( a parte de los tacos de pavo y la limonada de frutos del bosque, por supuesto) es el piano que tocaba solo si le dabas 25 centavos.
Y esto es todo (y no es poco) por esta semana. Gracias de nuevo por todos los comentarios tanto en estas entradas como en los relatos, y gracias por seguirme la pista y leerme al otro lado del océano. No sabéis lo increíble que es perseguir tus sueños cuándo estás viviendo uno de ellos.
¡Gracias y hasta el próximo relato!
Non paras!!! Cúidate moito... Bicos!!!
ResponderEliminarBen ves que non cambio!
EliminarMoitos bicos Teresa!
Por curiosidad, en canto tempo fixeches os 10Km.
ResponderEliminarCoidate e ánimo nesta aventura
¡Hola! Pois a verdade a min tamén me gustaría saber a resposta a esa pregunta, pero era día de distancia longa e nunca tomamos tempos... unha pena, a verdade.
EliminarMoitas grazas, un saúdo!